Las disparidades en muertes por sobredosis de opioides continúan empeorando para la población negra, sugiere un estudio

Un estudio patrocinado por los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) destaca la necesidad de una estrategia racialmente inclusiva para abordar la crisis de opioides en áreas muy afectadas

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Padre sentado en el sofá con dos niños pequeños.

En cuatro estados del país, las personas negras no hispanas experimentaron un aumento del 38% en el índice de muertes por sobredosis de opioides entre 2018 y 2019, mientras que los índices de otras razas y etnias se mantuvieran constantes o disminuyeron, según un nuevo estudio realizado por los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) y publicado en American Journal of Public Health. Estos datos alarmantes concuerdan con otras investigaciones que documentan la acentuación de las disparidades en muertes por sobredosis en las comunidades negras, mayormente a causa de la heroína y el fentanilo ilícito. La investigación subraya la necesidad de intervenciones equitativas guiadas por datos y basadas en la comunidad para abordar estas disparidades.

La investigación se llevó a cabo como parte del Estudio HEALing Communities, el cual busca reducir significativamente las muertes por sobredosis relacionadas con los opioides ayudando a las comunidades a implementar prácticas basadas en la investigación para tratar el trastorno por consumo de opioides y reducir otros perjuicios asociados con el consumo de opioides en Nueva York, Massachusetts, Kentucky y Ohio. Es el mayor estudio sobre implementación de estrategias para la adicción que se haya realizado hasta la fecha. Lo administran conjuntamente el Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas (NIDA) y la Administración de Servicios de Salud Mental y Abuso de Sustancias (SAMHSA) —ambos integrantes de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH)— a través de la iniciativa llamada Helping to End Addiction Long-term Initiative, o Iniciativa NIH HEAL.

“Debemos examinar y abordar explícitamente la forma en que el racismo estructural afecta la salud y conduce al consumo de drogas y a muertes por sobredosis”, dijo la Dra. Nora D. Volkow, directora del NIDA. “El racismo sistémico alimenta la crisis de opioides, del mismo modo en que contribuye poderosamente a otras áreas de disparidades e inequidades de salud, especialmente para las personas negras. Debemos asegurar que las intervenciones basadas en la investigación y adaptadas a las comunidades puedan atravesar los factores sociales y económicos que generan las disparidades en el consumo de drogas y la adicción, y llegar a todas las personas que necesitan los servicios".

Para este estudio se recopiló información de certificados de defunción de 2018 y 2019 en 67 comunidades con una población total de más de 8.3 millones de habitantes en los cuatro estados que participan en el estudio HEALing Communities. Los investigadores calcularon índices y tendencias de muertes por sobredosis de opioides —totales y para cada estado—, y luego analizaron tendencias por raza y etnia (blancos no  hispanos, negros no hispanos, hispanos, otras). En general, los investigadores no observaron cambios en el índice de muertes por sobredosis de opioides en estos estados entre 2018 (38.3 muertes por cada 100,000 personas) y 2019 (39.5 muertes por cada 100,000 personas).

Sin embargo, observaron un aumento general del 38% en el índice de muertes por sobredosis de opioides entre las personas negras no hispanas entre 2018 y 2019 en esos cuatro estados. No hubo cambios en general en los otros grupos raciales y étnicos. Las tendencias variaron en los distintos estados; los aumentos entre personas negras no hispanas fueron mayores en Kentucky (con un aumento del 46%) y Ohio (con un aumento del 45%). Los investigadores no observaron aumentos importantes en Massachusetts entre las personas negras no hispanas. Si bien los índices de muertes por sobredosis no sufrieron modificación para las personas negras no hispanas en Nueva York, hubo una disminución del 18% entre las personas blancas no hispanas, lo que sugiere que la población negra no hispana no se benefició en forma equitativa de los esfuerzos de prevención y tratamiento.

Los autores del estudio señalan que estos datos se suman a la evidencia de disparidades cada vez mayores en las muertes por sobredosis de opioides por raza y etnia, y destacan la importancia de contar con acceso a datos locales oportunos a fin de diseñar estrategias eficaces específicas para cada comunidad para reducir estas muertes. Existen numerosas intervenciones de prevención y tratamiento basadas en la investigación para abordar la crisis de sobredosis de opioides, la educación sobre las sobredosis y la distribución de naloxona, el uso de fármacos para el trastorno por consumo de opioides, las terapias conductuales y los servicios de apoyo para la recuperación. Lamentablemente, estas intervenciones por la mayor parte no han ganado amplia implementación en los entornos comunitarios, incluidas las áreas de tratamiento de adicciones, cuidado general de la salud, servicios de apoyo social, escuelas y el sistema judicial.

Para abordar este problema, el estudio HEALing Communities está trabajando con colaboradores locales, estatales y federales para obtener acceso más oportuno a datos sobre muertes relacionadas con sobredosis de opioides, tratamientos y otros problemas de salud asociados, y para incluir información demográfica importante, como raza y etnia. El acceso temprano a estos datos fue instrumental para delinear la planificación de intervenciones del estudio HEALing Communities, incluidos los diálogos para asegurar que las prácticas basadas en la investigación sean igualmente accesibles para todos los grupos raciales y étnicos. Por ejemplo, estos datos dictaron la cooperación con organizaciones comunitarias negras para mejorar el acceso a la educación sobre las sobredosis y la distribución de naloxona.

Si bien los datos que aquí se presentan son críticos para configurar la respuesta de salud pública, la pertinencia temporal de los datos sobre el consumo de drogas, la adicción y las sobredosis es un desafío constante. Los datos nacionales y estatales por lo general se recopilan anualmente, el acceso a la información es limitado y es posible que la disponibilidad de la información se demore meses. Los datos de salud relacionados con razas o etnias pueden ser limitados o simplemente no existir, y los datos de mortalidad se ven particularmente retrasados debido al tiempo que requieren las pruebas de toxicología.

“Cuanta más información local y oportuna puedan tener las comunidades, mayor será la posibilidad de adaptar sus estrategias de intervención”, dijo el líder del estudio Marc Larochelle, M.D., M.P.H., doctor de Medicina Interna General en Boston Medical Center y profesor adjunto de Medicina en la Facultad de Medicina de Boston University. "Sabemos que existen disparidades en la implementación de estrategias eficaces para reducir las muertes por sobredosis de opioides, pero el acceso temprano a mejor información como la que proveen estos datos permite que las comunidades aborden la equidad en forma más deliberada".

The Helping to End Addiction Long-term Initiative y NIH HEAL Initiative son marcas registradas de servicio del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HSS) de Estados Unidos.

Referencia: MR Larochelle, et al. Disparities in opioid overdose death trends by race/ethnicity, 2018- 2019, from the HEALing Communities Study. American Journal of Public Health. DOI: 10.2105/AJPH.2021.306431 (2021).